Recientemente fui en compañía de mi familia y mi novia a Los Campesinos Ecolodge, un proyecto de turismo rural comunitario en ubicado en la comunidad de Quebrada Arroyo, en Puntarenas (a 25km de Quepos). El pueblo es pequeño y subsiste gracias al proyecto, en donde varias familias trabajan arduamente por darle la mejor atención al turista.
El lugar cuenta con un restaurante, cabinas, senderos, un puente colgante de 130m de largo y un río con una catarata impresionante en donde las personas pueden bañarse y practicar deportes de aventura. La zona está irrigada por innumerables ríos (nunca he visto otro lugar con tantos) y también tiene gran influencia del Río Savegre. Grandes extensiones de bosque existen aquí y al parecer es visitado por muchos observadores de aves.
Durante la noche salen muchos sapos a cazar insectos bajo la luz que los atrae fuera de las cabinas
El clima fue perfecto durante toda nuestra estancia y pudimos observar muchas especies de plantas y animales que allí se encuentran. La comida que preparan las cocineras es excelente, tiene el verdadero sabor rústico de las zonas rurales del país. Todo el lugar en sí mostraba el arduo trabajo de todas las personas que pusieron empeño en lograr lo que existe hoy en día.
Encontré en una cabina este gecko gigantesco como de 30 cm
La hojarasca del bosque era frecuentemente perturbada por el rápido correteo de las Ameiva
La avifauna de aquí es muy rica debido a la confluencia de tantos hábitats como lo son bosques riparios, primarios, secundarios, charrales, potreros, jardines y demás. Enormes bandadas de tangaras y mieleros revoloteaban por los árboles del restaurante
Por fin logré tomar una foto buena de la común White-tipped Dove (Leptotila verreauxi)
Mi intento de congelar en vuelo a un Fiery-billed Aracari (Pteroglossus frantzii)
La fauna aquí es muy diversa gracias a la abundante cantidad de alimento que aquí encuentran las muchas especies animales. Esta época del año tiene una gran disponibilidad de alimento para animales insectívoros y frugívoros, por tanto fueron los que más observamos.
Un basilisco (Basiliscus plumifrons) por poco pasa desapercibido en el interior del bosque
Aunque las especies de aves que observé no se salían de lo común del lugar (estuve muy distraído bañándome en el río), logré avistar una pareja de Blue Ground Dove (Claravis pretiosa) perchadas en la rama de un árbol lejano
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