sábado, 20 de abril de 2013

Boletín Oropendola # 4

Vireo philadelphicus (1) El Philadelphia Vireo (Vireo philadelphicus) esta iniciando su migración hacia el Norte de América. Al igual que este individuo, billones de aves ya van de regreso a iniciar la temporada reproductiva. Fotografía en el INBioparque, Santo Domingo de Heredia.

ANIMALES

AMBIENTE

martes, 16 de abril de 2013

Occidente del Valle Central

Las montañas del noroeste del Valle Central (o las montañas del sur de la Cordillera de Tilarán) son un poco ignoradas por la mayoría de observadores de aves de Costa Rica y extranjeros. Todos (incluyendome) vivimos pensando en esos paraísos donde las aves abundan en cantidades enormes y las especies poseen llamativos colores. Carara, Braulio Carrillo, Sarapiquí, Osa y Palo Verde, solo por mencionar algunos de los lugares que más frecuentamos. Pero esta zona del occidente casi nunca genera reportes de observación de aves, de vez en cuando uno encuentra fotografías o algún reporte interesante, pero aún no así, en lo personal,  no veo que genere un interés en todos por visitar esta zona.
Recientemente se ha estado realizando una actividad con aves en esta zona, llamado el Conteo Navideño de Aves del Bosque nuboso de Occidente en donde existen varias rutas en la zona de San Ramón de Alajuela para observar y censar las aves. Una propuesta por conocer más sobre la avifauna de la región, y de paso, atraer más turismo al lugar.
IMG_0211Paisaje del lugar. Se observa un Electron platyrhynchum en una rama.
El Domingo anterior fui en compañía de mi familia y amigos a la comunidad de Los Lagos, cerca de la entrada de la reserva Alberto Manuel Brenes en San Ramón. Visitamos un pequeño proyecto turístico rural donde hay una granja, un lago y un camino de 2 kilómetros a través del bosque tropical muy húmedo, característico del lugar. Apenas llegamos al lugar, partimos de inmediato a observar aves para aprovechar las primeras horas matutinas. Pensábamos seguir una calle de tierra que baja hacia el Río Cataratita.
Iniciando la caminata observamos varias especies de aves acuáticas en el lago. Vimos garzas (Ardea alba), gallitos de agua (Jacana spinosa) y muchos rálidos (Laterallus albigularis, Porphyrio martinicus y Fulica americana). Pero cuando la abundancia y riqueza de aves se dispararon fue cuando empezamos a llegar al bosque, pasando primero por una zona en regeneración. Muchas tangaras, mosqueros, aves migratorias de todo tipo y semilleros.
Stelgidopteryx serripennis
Una Stelgidopteryx serripennis perchada en un cable al lago del lago.
La caminata inicia con un relieve bastante recto para luego empezar a descender rápidamente. Aquí se puede ver el trayecto. a mitad de camino, ya una vez dentro del bosque, aparecieron dos bandadas mixtas bastantes numerosas y fue donde logramos ver las mejores especies. De todas las especies, tres fueron las que más llamaron mi atención: Russet Antshrike (Thamnistes anabatinus) el cual se encontraba en grandes cantidades, Brown-billed Scythebill (Campylorhampus pusillus) el cuál es mi trepador favorito (la extraña forma del pico es lo que me llama la atención, cuál será su uso?) y finalmente un Black-headed Tody-Flycatcher (Todirostrum nigriceps) una especie que es poco común y generalmente pasa desapercibida por estar en lo más alto del dosel.
Seguimos avanzando hasta llegar al río donde observamos un White Hawk (Pseudastur albicollis) perchado a unos 400 metros de distancia. De acuerdo a lo que he escuchado, esta especie es muy común en la zona, así que no es de extrañar que si uno visita el lugar, es muy probable observar al menos un individuo. Luego de observar tan imponente rapaz, comenzamos el viaje de regreso al lago.
Observamos 88 especies en total, y antes de regresar a la casa, fuimos al camino que conduce a la Reserva Alberto Manuel Brenes en donde logre ver un Thrush-like Schiffornis (Schiffornis turdina), un lifer! Últimamente he tenido bastante suerte con las especies nuevas, ya alcancé las 615 observadas en Costa Rica! Recomiendo visitar la zona para la observación de aves y de paso ayudar con el turismo del lugar.

jueves, 11 de abril de 2013

Boletín Oropendola # 3

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Un mosquito saliendo de su pupa. En esta época estos insectos son muy comunes.

Animales:

  • Ya dio inicio el proceso de inscripción para el Conteo Nacional de Aves Residentes.
  • Se han realizado tres capturas de la especie White-eyed Vireo (Vireo griseus) en Tortuguero. Una especie rara que al parecer esta migrando un poco más al sur de lo usual.
  • Investigadores del laboratorio ornitológica de la Universidad de Cornell, grabaron los pichones de un Spoon-billed Sandpiper (Eurynorhynchus pygmeus). Esta especie posee poblaciones muy reducidas y corre un grave riesgo de extinción.
  • 101 nuevas especies de escarabajos.
  • La impresionante migración de las ballenas grises.
  • Una especie de Gecko puede adherirse a superficies húmedas!

Ambiente:

  • Imágenes impactantes de los daños ocasionados por una tubería de petróleo de Exxon que se quebró.
  • Nueva teoría sobre porque el hielo del mar Antártico esta incrementando.

sábado, 6 de abril de 2013

Temporada lluviosa

La semana pasada fue el inicio de la época lluviosa en Costa Rica. Todo parecía indicar que ya esta valiosa temporada se acerca: los árboles recuperando sus flores, los yigüirros cantando sus melodías reproductivas, las aves migratorias regresando a Norteamérica y algunos avisos climáticos (mañanas soleadas y tardes muy nubladas). Yo en lo personal estaba esperando con muchas ansias las lluvias, primero por que las plantas que sembré en mi jardín ya estaban a punto de morir por la falta de agua, las aves inician sus ciclos reproductivos y por que las ranas (al menos las del Valle Central) empiezan a unirse al coro nocturno de sonidos.
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Un Blue-crowned Motmot (Momotus momota) muy mojado producto de la primer lluvia.
La lluvias también me trajeron al jardín una sorpresa. Logré observar una especie que nunca había visto en los alrededores de mi casa (aunque si se logra ver como a 3km de distancia). Se trata de un Bicolored Hawk (Accipiter bicolor). Un juvenil con plumaje pálido el cuál se mantuvo perchado por 5 minutos en lo más alto de un árbol de ciprés.
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