Muchas veces nos encontramos en el dilema de decirle a un compañero de observación de aves la ubicación de un individuo. Uno debe de ser rápido y ser elocuente con las palabras que utiliza para que en el menor tiempo posible la otra persona logre ubicarlo. Los segundos son vitales, medio segundo menos puede hacer la diferencia entre identificar o no una especie.
A veces es muy fácil
A veces no tanto
En ciertos momentos uno entra en crisis, y es ahí donde salen a la luz las incoherencias:
“en el árbol más verde, que tiene las hojas más pequeñas, hay un colibrí”
En fin, cuando uno se inicia en la observación de aves, uno debe aprender a ubicarlas y saber decirle a otros donde están. Si uno baja los binoculares, existe el riesgo de perder de vista al individuo (auch), así que lo mejor es decirle al compañero que busque donde uno está “apuntando” con los binoculares. Si la situación no es tan grave, uno puede ir guiando al compañero usando objetos llamativos (flores, piedras, nubes, postes, etc.)
Existe una técnica que es muy útil en distintas situaciones. El Reloj imaginario. Quizá muchos lo han escuchado, pero para entenderlo mejor, le daré un breve repaso. Imaginemos un árbol seco, con varias aves en sus ramas, pero hay una en especial que deseo que los demás vean. Yo digo:
“-esta a las 6”.
En ese caso, todos nos imaginamos un reloj imaginario alrededor del árbol, y en el número 6, está el ave.
Un ejemplo (no igual al anterior, pero es para que tengan una idea)
Por último… ¿cómo ubicamos aves en vuelo? Hay que valerse de cuatro detalles: dirección de vuelo, objetos llamativos, distancia y la línea del horizonte. Primero uno debe indicar si el ave está volando debajo o encima de la línea del horizonte. A continuación, la dirección hacia donde se dirige. Luego se debe usar algo llamativo, como una casa o un poste. Finalmente se debe decir a la distancia que está con respecto a uno. Todo este proceso tiene los mejores resultados cuando se trata de observación de aves marinas o aves terrestres en un área abierta.
“Debajo de la línea del horizonte, volando a la derecha, cerca del objeto grande de color azul a unos 15 metros de distancia.”
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